En 1922 Stern y Gerlach hicieron pasar un haz de átomos de plata por una región con campo magnético no uniforme. Estos átomos se conforman con 46 electrones distribuidos en una configuración esféricamente simétrica de carga, y el electrón número 47 ocupa el orbital , correspondiente al número cuántico principal
,
.
Si la interacción del campo magnético y el momento magnético resultante fuera clásica, se esperaría detectar una banda simétrica y continua alrededor de la deflexión nula. La cuántica en cambio prevé un desdoblamiento en
componentes cuando el momento angular orbital de los átomos es
—que es entero, de manera que
es impar. Si los átomos se encuentran en su estado fundamental (
), debería registrarse un único punto en la pantalla; en el caso de que el electrón de la quinta capa se hallara en el estado
(
), habría que esperar en cambio 3 puntos de deflexión, correspondientes a las 3 orientaciones posibles para la componente del momento angular en esa dirección. Sin embargo el experimento muestra claramente dos componentes, lo que en principio sugiere que también falla la predicción de la cuántica, ya que estas dos proyecciones corresponden a un valor
para el momento angular de los átomos.
Goudsmit y Uhlenbeck propusieron en 1925 que los electrones poseen momento angular intrínseco, que nada tiene que ver con los grados de libertad traslacionales. Al igual que en el caso del momento angular intrínseco de un sólido, este también recibió el nombre de espín, a pesar de que la descripción de los electrones se realiza como una partícula sin estructura (no hay nada allí que pueda rotar). Es importante no asociar este término con una estructura que efectivamente gira: el espín es un concepto puramente cuántico, y no existe ninguna analogía en clásica; tampoco puede correlacionarse directamente con la descripción del momento angular orbital, ya que ahora no hay un operador diferencial asociado con el espín.
Sabemos de la física clásica que el movimiento de una masa asociado con un momento angular orbital
, cuya carga es
, genera un momento magnético dipolar
Estos elementos son útiles para interpretar lo que sucede en el experimento de Stern-Gerlach. El campo inhomogéneo aplica una fuerza sobre los
, según su orientación. Para ver esto recordemos que el potencial de interacción es
En la naturaleza cada partícula fundamental tiene un espín específico, que como vimos puede ser entero o semientero. Las primeras se denominan bosones porque obedecen la estadística de Bose-Einstein, y entre ellas se encuentran los mesones pi (=0), los fotones (
=1), etc., y cualquier partícula compuesta cuyo momento angular resultante sea entero. Las partículas con espín semientero se rigen por la estadística de Fermi-Dirac por lo que se las llama fermiones, y aquí encontramos a los electrones, protones, neutrones (
=1/2), los bariones delta (
=3/2), etc.
El experimento de Stern-Gerlach es sumamente importante porque no solo confirma la existencia del espín (además de medir su magnitud), sino que también corrobora las hipótesis de cuantización del momento angular. Pero además sirve para “preparar” un estado cuántico: un haz de partículas sobre cuyo estado no podemos decir nada a priori se desdobla mediante este experimento en componentes cuyos espines tienen una proyección bien definida.
Gustavo Castellano 12/11/2024