Ahora la corrección de primer orden es la predominante, y además el estado fundamental en ausencia de campo está
veces degenerado. Esto significa que para computar las perturbaciones de primer orden es necesario diagonalizar la matriz
para las
proyecciones posibles
y
(en el estado fundamental
y
están fijos). Esta diagonalización se simplifica bastante utilizando el teorema de Wigner-Eckart, ya que
es un operador vectorial (o un tensor de rango 1) en un espacio de Hilbert de dimensión
(todas las proyecciones
). Entonces debe cumplirse
donde el factor
es independiente de
y
. Esta expresión involucra en realidad tres igualdades, una para cada una de las tres componentes de los operadores. Como
nos concentramos en la identidad anterior para esta componente
Evidentemente, el miembro de la derecha ya es diagonal en la base de estados con
bien definidos. El término perturbativo se desdobla entonces según
, es decir toma
valores diferentes. Para encontrar
partimos del teorema de Wigner-Eckart para
teniendo presentes las identidades
Se deja como ejercicio desarrollar estas igualdades para reexpresar la identidad anterior como
(suele simplificarse esta expresión aproximando
).
Siempre pensando en
, es frecuente considerar la corrección a la autoenergía del estado fundamental
como la interacción
del campo con un dipolo magnético de magnitud
, lo cual solo es válido en la base donde
es diagonal.
En general, a temperatura ambiente estas autoenergías se separan; de todos modos la excitación térmica
no alcanza para llevar el sistema al primer estado excitado.
Gustavo Castellano 21/06/2023